Juan Bautista Expósito: “Echo de menos los entrenamientos con mis compañeros en el San Miguel”
Afrontar la actual situación sanitaria provocada por el COVID-19 con optimismo es primordial, aunque los anhelos salten como resortes en múltiples momentos del día. El atleta ubetense Juan Bautista Expósito lo tiene claro y aprovecha estos días para “mejorar aspectos de musculatura y movilidad articular específica de cara al futuro”.
Su espectacular estado de forma, que le ha llevado a alzar numerosos trofeos a nivel provincial en Jaén y Córdoba donde compite con el Club Los Califas, hace que el entrenamiento desde casa le dé margen para afrontar la vuelta al trabajo con optimismo. “Desde el primer día de la cuarentena hablé con mi entrenador y teníamos claro que la temporada se había acabado, por lo que comenzamos un descenso controlado de la actividad, un descanso activo”. En este sentido, comenta que cuenta con “un rodillo en casa y hago algunas sesiones suaves para no bajar del todo y mantener el peso más o menos controlado”.
Desde el club cordobés, le han propuesto una serie de ejercicios y vídeos para que todos los miembros del equipo puedan ejercitarlos desde casa. Además, su club de triatlón, el Trioviedo, ha comenzado una serie de sesiones diarias de rodillo “que también vienen genial para cuando me toca algo de cardio”.
A pesar de todo, y aunque continúa entrenando duro, es consciente que la situación de los deportistas quedará mermada cuando salgamos de esta tesitura. “Tenemos que ser realistas. Un mes (en el mejor de los casos) sin poder correr, te hace que necesites entre 6-8 semanas de entreno para volver a estar competitivo”.
No pierde el contacto con sus compañeros y amigos, y gracias a las redes sociales habla periódicamente con ellos. Juan Bautista señala que hacen “muchas videollamadas los miembros de mi grupo de entreno, pero ya echamos de menos los entrenos juntos en el San Miguel”.
Hay muchas ganas de volver a la pista, de eso no hay duda, pero “todo depende de cómo quede configurado el calendario”. El atleta ubetense recuerda que esta temporada ha logrado grandes objetivos (la marca de la Media Maratón, el ascenso a Primera División en pista cubierta con Los Califas, el podio en Itálica…), pero “todo giraba en torno al 800 y se cortó en medio del entrenamiento específico y cuando quedaba muy poquito para debutar al aire libre”, donde comprobaría si podía plasmar la marca esperada.
No obstante, mantiene la calma y no quiere obsesionarse con entrenar en casa “a lo loco; aún no me veo corriendo por los pasillos”, comenta con tono divertido. Por ello, concluye, quiere afrontar este confinamiento “como una oportunidad de fortalecer puntos débiles de cara al futuro y tomarse un descanso activo (siempre activo) para cuando todo vuelva a la normalidad poder empezar poco a poco y sin prisas. Hay muchas temporadas por delante y lo más importante es que toda esta pesadilla acabe lo antes posible”.